Perder a un ser querido es muy doloroso para todos nosotros. Esto nos desgasta mental y físicamente, porque el dolor emocional es tan grande, que la mayoría de nosotros no sabemos no sólo cómo actuar, sino también, cómo seguir adelante.
Dicho proceso se vuelve aun más doloroso cuando tienes que estar rellenando papeles, hablando con familiares que quizá no quieres ver y rememorando el momento varias veces en el tiempo para que todo esté en orden. Si, además, la persona fallecida no se encargó de dejar sus papeles en regla, el proceso será aún más lento.
¿Cómo podemos actuar ante semejante revés de la vida?
Lo importante es seguir una serie de pasos con nosotros mismos y entender un poco acerca de la temática legal, para poder, al menos, sentirnos un poco orientados y fuertes a la hora de enfrentarnos a esta situación.
En este artículo vamos a informarte un poco acerca del tema y vamos a darte consejos que puedes seguir siempre que lo necesites. A ninguno nos gusta hablar de este tema, pero, ten en cuenta que conocer y tener información acerca de esto puede ayudarnos a y a cualquier otra persona que vaya a pasar por dicha situación en el futuro. Dicho esto, comenzamos.
¿Cómo podemos afrontar la muerte de un ser querido?
Afrontar la muerte es algo doloroso y difícil para todos nosotros, y ninguno estamos realmente preparados para ello. Cada uno de nosotros, además, tiene una personalidad y una manera de ver las cosas, por lo que sería un error generalizar una serie de pasos a seguir por todos, ya que cada uno nos sentiremos de una forma u otra.
Sin embargo, hay una serie de consejos con los que podemos contar para poder sentirnos mejor:
- Permítete sentir el dolor.
La aceptación es clave en todo momento que nos hace pasarlo mal. Debemos permitirnos experimentar y sentir la ira, tristeza o confusión que sintamos durante estos momentos.
Es completamente normal sentirnos de mil maneras, y si escondemos dichas emociones, pueden surgir de una manera incontrolable en el futuro con otras personas o situaciones que nada tengan que ver. Cuando nos desahogamos, nos sentimos mejor.
- Busca apoyo.
Es normal que queramos estar solos cuando algo así nos ocurre, pero no debemos confundir pasar tiempo a solas con aislarnos. El proceso de duelo puede volverse insostenible si estamos solos todo el tiempo. Para ello, busca apoyo en tus seres queridos o en profesionales de la salud si lo necesitas.
Compartir tus sentimientos y pensamientos con alguien de confianza puede ayudarte a procesar el dolor y sentirte acompañado en este proceso.
- Cuida de ti mismo.
El amor propio y el cuidado personal es esencial ante esta situación. Debes descansar lo suficiente, comer bien y mantener una rutina. Para sentirte mejor, también puedes realizar actividades que te brinden consuelo y bienestar, como practicar ejercicio, meditar, escribir en un diario o dedicar tiempo a tus pasatiempos.
- Recuerda a tu ser querido.
Puede que por un momento busques dejar de sufrir lo antes posible y para ello, te lances a tirar a la basura las fotos, los recuerdos y objetos personales de dicha persona para hacer borrón y cuenta nueva. Sin embargo, esto puede causarnos sensación de culpa y arrepentimiento en un futuro cuando nos encontremos mejor.
Es bueno aceptar la pérdida sin olvidarnos del amor y los momentos que pasamos juntos. No debemos estar todo el rato pensando en que ya se ha ido, pero tampoco podemos olvidarlo sin más. Algunas personas se deciden a crear un álbum de recuerdos, realizar una donación en su nombre o participar en actividades que le hubieran gustado. Esto puede ayudarnos a mantener una conexión emocional con dicha persona, aunque ya no esté con nosotros.
- Busca significado espiritual.
La muerte es algo traumático para todos nosotros.
Por este motivo, las creencias filosóficas, religiosas o espirituales pueden ayudar a muchas personas a tener esperanza y encontrar un porqué y un propósito dentro de la misma muerte. Lee un poco acerca de cómo aceptan la muerte en otras culturas; puede que así encuentres la manera de aceptarlo y sentirte mejor.
- No tengas miedo de ir a terapia.
¡Suelta todo prejuicio sobre el psicólogo!
Si sientes que el dolor y la tristeza dificultan tu vida diaria, considera buscar apoyo de un psicólogo. Ellos pueden ayudarte a procesar tus emociones y a proporcionarte herramientas para afrontar la pérdida de manera saludable. De hecho, la ayuda psicológica es más útil de lo que crees, y hay algunos tipos de terapia que se ofrecen durante una pérdida que son bastante útiles para lidiar con el dolor.
La terapia de duelo es una de las más comunes para ayudar a las personas a lidiar con su dolor tras la muerte de un ser querido. Durante ella, el profesional nos apoyará emocionalmente y nos proporcionará técnicas que podemos seguir para gestionar el dolor y la tristeza.
También nos ayudará a encontrar formas saludables de afrontar la pérdida. Por ejemplo, según la CNN acariciar a un perro es una buena forma de sentirnos mejor durante el duelo ¿lo sabías?
Además de la terapia de duelo, durante el proceso puede considerarse también la terapia de grupo de apoyo. Esta terapia consiste en compartir experiencias con otras personas que están pasando por situaciones similares. Los grupos de duelo brindan un entorno de apoyo donde las personas pueden compartir sus sentimientos, recibir apoyo de otros miembros del grupo y aprender estrategias para afrontar el duelo.
Así como la terapia de apoyo, también será apta la terapia familiar, y con más fuerza aún, ya que la pérdida de una familiar afecta a todo el sistema familiar conocido (de hecho, muchas familias se pelean por problemas tras el fallecimiento de un ser querido o tras un desacuerdo con el reparto de la herencia familiar, lo cual es peor aún). La terapia familiar puede ayudar a los miembros de la familia a comunicarse, procesar el dolor y el cambio, y encontrar formas de apoyarse mutuamente en el proceso de duelo.
Una vez que hayamos considerado cuidar de nosotros mismos, nos enfrentaremos a todo el procedimiento legal que conlleva el fallecimiento de un familiar, sobre todo si somos familiares directos.
Estos procedimientos pueden ser tediosos y agotar mentalmente a cualquiera, por lo que muchas familias se deciden por contratar a un abogado o asesor legal que lleve el asunto por ellos. En casos de herencias, por ejemplo, podemos contar con la empresa especializada Tramites Fáciles Santander Abogados & Asesores por lo que hay opciones que pueden aliviarnos de estar pendientes de tanto papeleo en esta difícil situación.
Asesoramiento legal pertinente.
Si conocemos un poco acerca del tema, nos sentiremos menos perdidos o confundidos cuando algo así ocurra. Siempre podremos también, además, aconsejar a una persona que esté pasando por esta situación para que le sea más llevadero.
Lo primero que debemos tener en cuenta es el certificado de defunción, el cual podemos obtener a través del médico que certifique la defunción o realice su autopsia.
¿Por qué es importante dicho certificado? Es importante, ya que con él padreemos realizar los trámites legales posteriores, además, es requerido por diversas instituciones.
Una vez obtengamos dicho certificado, debemos registrar la defunción en el registro civil local. Allí presentaremos el certificado de defunción y proporcionaremos la información necesaria sobre la persona fallecida, como nombre, fecha de nacimiento y datos de identificación. El registro civil emitirá un acta de defunción que será necesaria para realizar otros trámites.
Tras registrar el certificado, se pasa a la lectura de la herencia y testamento, emitida por un notario. Si el fallecido dejó previamente un testamento, es importante que dicho documento sea presentado ante el notario correspondiente para que se inicie el proceso de distribución de la herencia de acuerdo con la voluntad expresada en el testamento. Si no hay testamento, se seguirán las leyes de sucesión pertinentes.
Debemos contactar con la agencia de seguros tras presentar el certificado de defunción en el registro civil, en caso de que el fallecido tuviera alguna contratada. Tras contactar con ellos, podemos solicitar los pagos pertinentes según la cantidad que corresponda a cada persona de la familia.
Asimismo, notificaremos a las instituciones financieras y otras entidades sobre el fallecimiento para cerrar o transferir las cuentas y activos del fallecido. Es importante tener en cuenta las deudas de la persona, si las tuviera, para que no nos sorprendan en cualquier momento embargándonos algo importante que dejara el fallecido como aval.
Para acabar, y aunque nos duela decirlo, también es posible que tengamos que pagar una serie de impuestos finales o realizar otros trámites relacionados con los impuestos en nombre del fallecido.
Estos son algunos pasos generales que te hemos dado para orientarte un poco en esta amarga situación, pero sin duda recomendamos buscar asesoramiento legal y consultar con profesionales especializados en asuntos sucesorios y legales para obtener una guía precisa y personalizada sobre los procedimientos que debes seguir tras la muerte de un familiar.
