¡Qué importante es ser feliz con el lugar en el que se vive! Esta es, sin duda, una de las claves para estar convencidos de que disponemos de una buena calidad de vida. Y con la palabra “lugar”, por cierto, nos queremos referir a varias cuestiones: en primer lugar, con la ciudad en la que vivimos. Sin duda, es clave sentirse integrado en ella y disponer de todos los servicios básicos. También es importante encontrarnos en un barrio que sea tranquilo y en el que haya zonas verdes cercanas. Finalmente, y no por ello menos importante, es clave que seamos felices con el hogar en el que nos encontramos y en el que queremos construir un futuro.
Es ese hogar el lugar al que nos vamos a referir a lo largo de este artículo. Es el espacio en el que vamos a pasar buena parte de nuestro día (recordad que pasamos entre un 25% y un 33% de nuestro día durmiendo y que también nos encontramos en él durante momentos como la tarde o la hora de la cena en la mayoría de los casos). Por tanto, es evidente que debemos hacer todo lo posible por construir un hogar en el que sepamos que tanto nosotros como las personas que nos van a acompañar nos sintamos cómodos y en el que sepamos que le vamos a sacar todo el jugo posible a nuestro día a día.
Posiblemente, estéis realizando un debate interno para preguntaros qué es lo que hace falta para conseguir una vivienda en la que podamos ser felices sin ninguna duda. Pues lo cierto es que son necesarias bastantes cuestiones en relación a este asunto. Lo primero es que la vivienda se encuentre en un sitio estratégico dentro de la ciudad, un sitio que sea tranquilo y en el que tengamos la certeza de que vamos a poder descansar de la mejor manera posible. Además de eso, esa felicidad va a depender de la amplitud de la vivienda. Si es muy amplia, vamos a tener muchas más facilidades, aunque una vivienda que sea más pequeña también puede ser el hogar de nuestros sueños.
Nosotros creemos que una de las claves para tener una felicidad completa en nuestra vivienda son los muebles. Si se trata de muebles que se adaptan perfectamente al espacio del que disponemos dentro del hogar, nos van a facilitar y mucho la vida, haciendo posible que dispongamos del espacio suficiente para movernos sin riesgo de chocarnos con nada y permitiéndonos no sentirnos agobiados en nuestra propia casa. De los muebles va a depender en buena medida el grado de felicidad con el que nos podamos sentir en el interior de nuestras cuatro paredes y precisamente por eso debemos conocer de antemano qué vamos a necesitar y qué ventajas va a presentar para nuestro día a día.
Son muchos los datos que ponen de manifiesto que hay mucha gente que piensa lo mismo. En un estudio realizado por el portal web Statista se recoge el gasto de los hogares españoles en mobiliario, equipamiento del hogar y gastos relativos a la conservación de la vivienda. El estudio comprende todo el tiempo que ha transcurrido desde los años 2005 y 2022. El último de los años que se comprenden en ese análisis es uno de los que conllevó un mayor gasto, un gasto que superó los 9.200 millones de euros. Esto muestra que estamos en un momento en el que los muebles son considerados como un elemento indispensable en la consecución de un hogar en el que de verdad seamos felices.
Una de las tendencias que se viene haciendo fuerte en lo que respecta a la industria del mueble es que hay menos clientes, pero los que lo son gastan más. Así es como lo hace saber una noticia publicada en la página web del medio de comunicación Castellón Plaza. Desde luego, se trata de un asunto que nos parece lógico por varios motivos. En primer lugar, hay menos clientes porque son muchos los que amueblaron sus viviendas en los últimos años. En segunda instancia, el gasto es mayor ahora porque la conciencia que existe en relación al aumento de la calidad de vida que provoca los muebles es más grande que en épocas pasadas.
La industria del mueble sigue teniendo buena salud en España y esa sensación nos la han corroborado desde Sergio Nisticò, una entidad especializada en el diseño de interiores. Nos comentan sus profesionales que los muebles son la primera de las opciones que manejan los propietarios a día de hoy para hacer de su hogar un lugar mucho más acogedor y que haga más cómodo el entorno en el que viven. No es para menos. Del mueble dependen muchas de las opciones que manejamos en este sentido y lo cierto es que no hace falta acometer una inversión demasiado grande para que el cambio sea sustancial para toda la familia.
Un arma especialmente importante si somos varias personas en casa
Cuando en una vivienda convivimos varias personas, se hace necesario que exista una determinada organización del espacio. No nos malinterpretéis: siempre es necesaria esta organización, pero a medida que crece el número de personas que habitan el hogar, ese factor es cada vez más relevante. Por tanto, si somos una pareja con hijos, existe una gran necesidad de conseguir esa organización. Lo cierto es que eso va a tener una influencia muy grande en el bienestar de toda la familia, aunque en ocasiones no seamos plenamente conscientes de ello. Factores como la comodidad son los que más beneficiados van a salir de cualquier cambio que llevemos a cabo en este sentido.
Apostar por muebles modernos es siempre la mejor de las alternativas para hacer que nuestra vivienda ofrezca las posibilidades que necesitamos dentro de ella a día de hoy. Tengamos en cuenta que han cambiado alguna de las acciones que venimos desempeñando en la actualidad dentro del hogar. Desde la pandemia, trabajar desde nuestro domicilio se ha convertido en algo más o menos habitual, así que un montón de gente tiene la necesidad de disponer de un espacio dentro de casa que esté habilitado para una labor como esa. Del hecho de componer un espacio que esté preparado para ello depende en buena medida la eficiencia que demostremos tener cuando trabajamos desde casa.
¿Qué lugar de la casa conviene rediseñar primero?
Esta es una de las preguntas que más suelen realizar los y las cabezas de familia cuando ya se han propuesto acometer una reforma de su hogar. Y la verdad es que es una pregunta que nos parece lógica si tenemos varios espacios en los que trabajar. La respuesta, eso sí, depende de cada caso en particular. Depende, en buena medida, del estado en el que se encuentre cada estancia dentro del hogar. Si tenemos un dormitorio que presente una mayor cantidad de carencias que nuestro salón o cocina, lo lógico es que empecemos por el dormitorio y que lo hagamos a la máxima brevedad posible.
Lo más importante de todo es que demos ese pequeño salto que implica decir “venga, está confirmado, vamos a rediseñar el interior de nuestra vivienda”. Eso viene a decir, en primera instancia, que somos perfectamente conscientes de que ese cambio hace falta. Y eso es clave porque somos conscientes de que existe un problema o un potencial problema. Y, en segunda instancia, hace que de alguna manera sintamos que no hay vuelta atrás. A veces es mejor así para no arrepentirnos y que no se generen dudas que no deberían tener motivo de existencia. El rediseño del espacio interior de nuestro hogar, si se hace con gente de confianza, nos va a proporcionar las mejoras que a buen seguro estamos esperando.
Estamos convencidos de que van a ser muchas las familias que incorporen mejoras en su domicilio en los próximos años. Y no nos extraña en absoluto que así sea. Sabemos de sobra que lo primero que necesitamos para ser felices es que nuestro hogar cumpla con los requisitos que necesitamos para ser felices. Y hay que continuar haciendo todo lo posible para que así sea. Vamos a notar la diferencia y nadie tiene la menor duda de que así será. Hay muchas viviendas que fueron reformadas hace demasiado tiempo o que nunca lo han sido y sus dueños y dueñas saben perfectamente que se acerca la hora de darles ese cambio de imagen que el propio lugar demanda.
En ocasiones, potenciar la vivienda que ya tenemos puede resultar mucho más ventajoso que comprar una nueva. Todavía son muchas las personas que se sorprenden cuando ven la eficacia que tiene un cambio como el que hemos planteado en los párrafos anteriores, un cambio que provoca muchas mejoras y que sin duda va a permitir que, con independencia de la edad que tengamos y nuestros gustos personales, nos sintamos mucho mejor con el lugar en el que nos encontramos. Eso es fundamental. Si no nos encontráramos a gusto donde vivimos, ¿dónde lo estaríamos?
